martes, 6 de diciembre de 2011

3 metros son lejos.

Venga, unos escalones más, y sin hacer ninguna tontería como mirar hacia abajo.. unos más y ya estarás en clase. Pero él es más fuerte que cualquier droga, y voy y le miro, y le veo, y me está mirando. Sus ojos chocolate son lo mejor de todo el instituto. 
Entonces me vuelvo, mierda, me estaba mirando. Y me ha pillado. Sigo subiendo los escalones.. con cuidado de no tropezar, ahora si sería catastrófico, último escalón, sonrío para mis adentros. Le tengo a veinte pasos, a diez segundos... pero entre los dos parece haber tres capas de cristales blindados.