sábado, 10 de septiembre de 2011

Fantasías

Me gusta dormir con la ventana abierta y la persiana subida, me gusta pensar que a pesar de vivir en un cuarto, mi príncipe o un hombre lobo, a lo tipo Jacob Black, pueda sorprenderme por la noche. 
A falta de estos dos, un loco enamorado también es válido. Pero noche tras noche, despierto sola, igual que me dormí, aunque más despeinada.
A ver si crezco y mi imaginación fantasiosa desaparece..